13 de Diciembre: Ley Perfecta

Palabra:

“La ley de Jehová es perfecta, que convierte el alma; El testimonio de Jehová es fiel, que hace sabio al sencillo. Deseables son más que el oro, y más que mucho oro afinado; Y dulces más que miel, y que la que destila del panal. Sean gratos los dichos de mi boca y la meditación de mi corazón delante de ti, Oh Jehová, roca mía, y redentor mío” (Salmos 19:7-10,14)

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La sabiduría de Dios tiene como fuente principal su palabra. En las escrituras de hoy, el salmista nos habla de cómo la ley del Señor nos otorga esa sabiduría y como la obediencia a sus maneras, nos brinda regocijo y claridad. Nada vale más que ello, nada es más reconfortante, más que el “Mucho oro afinado” preciado y dulce más que la miel “que destila de panal”.

Dios nos ama sin medidas y nos otorga dones maravillosos que solo pueden ser honrados sirviendo en gratitud y fidelidad a su obra. Sólo de esa manera El Señor puede revelarnos, la verdad que únicamente puede encontrarse en la misión que nos ha encomendado. Cuando abrimos nuestro corazón a Cristo, El Señor guiará nuestros caminos y nos hará entender que todo lo que realmente necesitamos, su presencia y guía, estarán para nosotros.

Pero ¿Cómo conocemos esa Misión? ¿Cómo se nos revela esa verdad? La respuesta nos la otorga el salmista: “Sean gratos los dichos de mi boca y la meditación de mi corazón delante de ti”; si nuestro corazón, palabras y acciones son movidas por la fe continua y sólida en el Señor, no sólo conoceremos el propósito, sino las herramientas para en Cristo, llevarlo a cabo.

Comienza hoy velando porque tu corazón y tus palabras le pertenezcan al Señor; es así que Él será el centro de tu vida.

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Oración:

Señor, te ofrezco mi corazón y mis palabras, porque sé que te pertenecen. Permíteme encontrar la sabiduría, claridad y regocijo que vienen de seguirte, porque es mi objetivo cumplir tu propósito y honrar el maravilloso privilegio de tenerte en el centro de mi vida. Amén.