Depositen en él toda ansiedad, porque él cuida de ustedes. (1 Pedro 5:7)
Señor, calma mi corazón inquieto ante la adversidad, brindándome Tu paz que sobrepasa todo entendimiento y asentado en una verdad: que Tu poder supera cualquier fuerza y que Tu misericordia siempre puede más. Que pueda entender todas estas realidades Padre, para descansar en tranquilidad y en calma, como lo deseas para cada uno de nosotros. Amén.
[adinserter name=”Block 2″]
[adinserter name=”Block 3″]